Reflexiones de Eliza Byard en Orlando

 

Para la familia GLSEN,

Anoche en el Stonewall Inn aquí en la ciudad de Nueva York, y en miles de vigilias similares en todo el país, la gente se reunió en memoria de las víctimas del ataque club nocturno Pulse en la ciudad de Orlando. En tiempos de crisis, buscamos oportunidades para estar juntos, para conectarnos con los demás, y que sea visible nuestro duelo y nuestra determinación de superarnos.

La pérdida de las 49 personas fallecidas y las decenas de heridos, en el club Pulse ocurrido el domingo es casi más de lo que podemos soportar. La mayoría de las víctimas eran LGBTQ. La mayoría de las víctimas eran latinos. Muchos eran recién graduados de la escuela secundaria. El autor ha sido identificado como musulmán, y para muchos participantes musulmanes en estas vigilias, el duelo se mezcla con el miedo de asalto verbal o venganza violenta. No podemos permitir que eso ocurra en nuestra guardia.

En su mejor momento, cuando todos los que se reúnen son conscientes de su propósito común, estas reuniones pueden ayudar a sanar, y demostrar nuestra capacidad de crear poder en la comunidad a pesar de nuestras diferencias.

Nuestros mejores instintos en estos momentos es imitar  lo que los educadores aprenden a  hacer para ayudar a los estudiantes después de de una tragedia o un trauma. La Asociación Americana de Consejeros Escolares sugiere que cuando el miedo, la violencia o el odio destrozan comunidades escolares, los educadores deben "reconstruir y reafirmar lazos y relaciones" con el fin de restablecer un sentido de conexión, y "hacer frente a su propia reacción ante una crisis y el estrés "con el fin de ser capases de ayudar a sanar a comunidad abatida. 

En nuestro trabajo a través  los años, hemos creado una organización dedicada a construir conexiones por medio  de nuestras diferencias, fomentando el respeto para todos, y, quizá sobre todo, dedicado al poder de transformación de las comunidades de aprendizaje donde se valora y se respeta a cada estudiante  exactamente quienes son. Hemos sido testigos del poder de los líderes estudiantiles educando a tales comunidades, sabemos por qué todo este  trabajo vale la pena. 

En este momento de dolor y luto, todos nosotros en GLSEN, tenemos una contribución importante que hacer.

Ya sea un educador, estudiante, líder de zona, o un donante, estos eventos trágicos hacen un llamado a cada uno de nosotros para apoyarnos mutuamente en nuestro dolor, para construir una comunidad con aquellos de otras comunidades, y colectivamente encontrar la fuerza para continuar adelante con trabajo. 

Juntos, y solamente unidos, podemos crear escuelas, y un mundo con igualdad y respeto para todos.

PD. Si desea encontrar u organizar una vigilia en su área.

En solidaridad, Eliza Byard Directora Ejecutiva